Rosa Martínez, Van al aire, nos distingue con el premio Liebster blog, otorgado a aquellas páginas con menos de doscientos seguidores, pero que a su juicio -gracias, Rosa- son interesantes. Es decir, tenemos el dudoso privilegio o castigo de tener pocos seguidores, poquísimos en mi caso, pero del que alguna buena alma caritativa se acuerda y nos recomienda.
Para seguir fomentando esta cadena, ahí van los premiados por mi parte:
. Las letras dormidas, editado por Eva Díaz Riobello, fuente en la que siempre puedo encontrar un buen micro para hacerlo audio y, además ella, gustosamente se presta.
. No me vengas con historias, editado por Acuática. Marina, a la falta de seis seguidores para coronar la meta de los doscientos. Su blog me guió por el mundo del microrrelato desconocido para mi hasta que llegué a su casa.
. La guarida del cuentista, editado por Fernando Rubio Pérez, entusiasta dialogador, que acabará escribiendo teatro. Al tiempo...
. Destellos inspiradores, editado por Ana María Ranieri, pasen y vean.